La banca no dejará caer ninguna cadena de hoteles importante: «No queremos quedárnoslos otra vez»
Los rebrotes y la falta de visitantes extranjeros por la gestión de la pandemia en España elevarán hasta 100.000 millones las pérdidas del sector turístico este año, según Exceltur. Pero la banca no va a dejar caer ninguna cadena importante del sector, por imagen, por solidaridad con el momento… y porque no quiere volver a quedarse con hoteles.
La primera gran empresa hotelera en ser rescatada ha sido Hotusa, como adelantó OKDIARIO, con nuevos créditos avalados por el ICO de 50 millones más una emisión de pagarés también respaldada por el Estado de otros 100. Sin embargo, no será suficiente y en septiembre tendrá que renegociar sus casi 800 millones de deuda. Y no será la única.
«En la segunda quincena de septiembre, todas las hoteleras se sentarán con sus acreedores para plantear cuánto necesitan para aguantar hasta Semana Santa de 2021. Y los bancos se lo darán, porque no van a dejar caer a ninguna empresa importante del sector», señala una fuente al tanto de la situación.
Los motivos de esta actitud de las entidades financieras son varios. Por un lado, está la necesidad de «arrimar el hombro» con las empresas españolas en una hora tan difícil, que en este caso se traduce en un aplazamiento de los vencimientos de los créditos hasta al menos el segundo trimestre del próximo año, e incluso la concesión de préstamos nuevos para financiar el circulante si es necesario, como en el caso de Hotusa.
Mejorar la imagen… y no volver a quedarse con hoteles
En segundo lugar, e íntimamente relacionado con el anterior, está la cuestión de la imagen. «Esta no es una crisis financiera como la de 2008 y los bancos no somos el problema sino que debemos ser parte de la solución», han dicho al alimón Ana Botín, presidenta del Santander, y José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia.
El sector financiero todavía está intentando reparar los daños que ha sufrido su reputación con el rescate de las cajas de ahorros, las preferentes, las convertibles, las cláusulas suelo, los gastos hipotecarios, etc. Y la crisis del covid le ofrece una oportunidad de oro. «En ese contexto, imagina que llevan a concurso a un montón de hoteleras y mandan al paro a miles de sus trabajadores, sería impensable», según otra fuente.
El tercer motivo es menos altruista todavía: «Los bancos ya se quedaron muchos hoteles cuando estalló la burbuja inmobiliaria al ejecutarlos como garantía de créditos que no iban a cobrar, y tuvieron que darles salida como pudieron, con grandes pérdidas en la mayoría de los casos. No quieren volver a quedarse con hoteles otra vez», según estas fuentes. «Prefieren dar hilo a la cometa y esperar que la recuperación no tarde mucho en llegar».
Semana Santa de 2021, fecha tope
Así pues, la respuesta va a ser mantener vivas a las hoteleras a pesar del desplome de ingresos hasta la Semana Santa de 2021. Ese será el momento clave: si para entonces el virus ha remitido (o ya existe vacuna), se han levantado las restricciones para viajar a España y el inicio de temporada va bien, el sector saldrá adelante salvo algún caso puntual inevitable.
Pero si la crisis se prolonga y el turismo sigue sin recuperarse para entonces, la banca tendrá que tomar decisiones drásticas porque no podrá asumir nuevas pérdidas. Llegarán los cierres de empresas y establecimientos, y los despidos.
